¡España está ardiendo!

Un verano más se quema España, y aunque parece que ya estamos acostumbrados a que ésta sea la imagen más vista en la televisión, todos los años por estas fechas, cada vez empieza a ser más preocupante, habiendo superado ya en lo que llevamos de año, la cifra total de hectáreas quemadas durante el 2008.

Extinción de incendio

En este año, ha habido 9.101 incendios, que han arrasado con casi 36.000 hectáreas repartidas en varias provincias: Teruel, Lérida, Almeria, Ávila, Alicante, Cuenca, Huelva, Zaragoza, Toledo, Palencia, León, Albacete, Cádiz, Tarragona y un largo etcétera; y lo peor de todo, son las 9 vidas que se han cobrado, la mayoría, personas que trabajaban en maniobras de extinción.

Un dato alarmante, es que en España y Portugal, se producen el 81% de los incendios de Europa. Y es verdad que la orografía y el clima no nos ayudan mucho, que si rachas de viento muy fuerte, que si las altas temperaturas… Pero mi pregunta es la siguiente: ¿por qué no hacen caso de las peticiones de ciudadanos de las áreas rurales? Todos los que viven en pueblos, aseguran que no se limpia el campo, e incluso que cuando llega el momento de las labores de extinción, hay muy pocos medios, teniendo un helicóptero dedicado a esas labores para un área muy grande.

Además según la asociación Greenpeace, el 90% de los incendios son intencionados, y tan sólo dos de mil incendios de este tipo acaban en condena. Las razones que se dan es que es muy difícil identificar al pirómano, las causas del fuego y poderlo probar a la hora del juicio, así como la poca colaboración ciudadana.

La verdad es que se dice que los incendios ya no son provocados por la especulación inmobiliaria, ya que la ley prohíbe recalificar terrenos quemados hasta después de 30 años, y también que han caído los provocados por la industria maderera, de lo que tengo mis dudas, a la cual le vale perfectamente la madera quemada para fabricar conglomerado a un precio mucho más económico. Ahora se culpa a las empresas que llevan a cabo labores de extinción, a agricultores irresponsables o incluso a retenes forestales. ¿Vosotros que pensáis?

La alerta máxima de peligro de incendios sigue activada, por lo que debemos tener cuidado si vamos al campo con cualquier cigarrillo o cerilla, así como no dejar vidrios o cualquier cosa que pudiera provocar un incendio.

Pero no sólo la población en general tiene que ser cuidadosa, que ya se han encargado las instituciones competentes de que no se puedan limpiar parcelas privadas o disfrutar de una maravillosa barbacoa en el campo, ni en invierno ni en verano. Si no también pedir una mejor gestión y planificación forestal, así como el seguimiento del estado de los montes.

No podemos seguir consintiendo que todos los veranos se destruyan montes de gran valor ecológico. Esperemos que el año que viene no hablemos de lo mismo.

Sobre el autor

Cristina
Viajera de vocación y profesión, con estudios en la Diplomatura de Turismo, especializada en el asesoramiento y venta de viajes en agencias de viajes off-line y on-line, organizadora de las Tertulias Viajeras y sobre todo bloguera en Está en tu Mundo.

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