Este artículo es para todos aquellos que estén buscando información para su viaje a Irán, y lean todo tipo de cosas diferentes y contradictorias, tal y como me pasó a mí. Para vuestra tranquilidad, es todo mucho más fácil y cómodo de lo que parece, y aquí está todo lo que necesitáis saber:
Visado y documentación para viajar
Este era un apartado que nos tenía desconcertadas, pero finalmente fue muy fácil conseguir la visa. En nuestro caso optamos por la modalidad de Visa on Arrival, que nos permitía una estancia en el país no superior a 30 días, y sólo necesitamos el pasaporte con una vigencia superior a 6 meses, al menos 3 páginas en blanco y sin ningún sello de Israel, el código de autorización del Ministerio de Asuntos Exteriores que conseguimos a través de Viajes Persépolis (50 €), trámite que tardo tan sólo una semana, y el pago del visado en el aeropuerto de Teherán (60 €).
También podréis obtener el visado en la Embajada de Iran, donde además de la carta de invitación o el código de autorización de entrada al país, te pedirán que rellenes el formulario, una foto en la que no es necesario llevar velo, y el trámite debe de hacerse con al menos 20 días de antelación.
En breve, se podrá conseguir este código en la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, que ahora mismo, está bajo construcción.
En cualquier caso, necesitas un seguro de viaje que puedas presentar para la solicitud del visado.
¿Es obligatorio el seguro de viaje a Irán?
Sí, es necesario contratar un seguro de viaje para obtener el visado a Irán, entre otros requisitos que comentábamos anteriormente. Por ello, te recomendamos que viajes con total tranquilidad con seguros IATI, que ofrecen un 5% de descuento para nuestros lectores, con amplias coberturas y nunca te dejan solo.
¿Es seguro viajar a Irán?
El Ministerio de Asuntos Exteriores califica Irán como un país seguro para viajar, y sólo advierte sobre visitar las zonas fronterizas con Afganistán, Pakistán e incluso Turkmenistán, que no creo que vaya a ser vuestro caso. Una vez en el destino, los iraníes sólo te advierten sobre el desierto de los Kaluts, ya que por el tráfico de drogas de unos países a otros fronterizos, se están cometiendo asesinatos, robos y otros problemas.
Mi experiencia, es que es un país muy seguro, en especial en el eje turístico, en el que las mujeres pueden andar solas por las calles aunque ya haya caído la noche, hay muy poca incidencia de robos, aunque por supuesto siempre hay que tener cuidado, y donde todo el mundo te ayudará. No dudéis en preguntar.
A nosotras eso fue lo que nos pasó, la gente es muy hospitalaria, y todo el mundo nos ayudó muchísimo durante toda nuestra estancia, tanto hombres como mujeres, pero si puedo asegurar que con las mujeres hemos encontrado una especial complicidad, mucho más que en otros países árabes del mundo: tanto en los vagones de metro sólo para mujeres donde nos ayudaban a empujar para salir, como en restaurantes cuando nos querían cobrar de más, o en los trayectos de autobús cuando compartían sus mandarinas.
Deshaceros de cualquier tipo de prejuicio, y disfrutad de este fantástico país y su hospitalaria gente. ¡Os encantará!
Ropa para viajar a Irán
El género masculino no tiene de qué preocuparse en absoluto cuando prepare la maleta, ya que mientras no llevéis pantalones cortos o camisetas de tirantes, algo curiosamente muy penado para los iraníes, podéis ir prácticamente como queráis.
En verano, en cualquier caso, buscad comodidad con ropa ligera, de algodón, los hombres camisetas de manga corta, protector solar, gafas de sol y algún jersey o forro polar por si pasáis alguna noche en el desierto o en el norte del país.
En invierno, tenéis que ir abrigados, en especial desde finales noviembre hasta febrero, ya que incluso nieva frecuentemente en muchas ciudades como Teherán, así que jerséis, gorros bufandas y las gafas de sol por la gran claridad que hay en todos los sitios.
Sobre el calzado, yo siempre me llevo unas zapatillas cómodas para andar, si vais en verano podéis llevar sandalias (tanto hombres como mujeres) y unas chanclas para las habitaciones o las duchas.
Especial mujeres: ¡Qué ropa me llevo a Irán!
Siendo una mujer que viajaba a Irán, preparar la maleta fue un auténtico suplicio, donde me asaltaban miles de dudas, a pesar de haber viajado a varios países árabes… ¡Pero os aseguro que no tenéis de que preocuparos!
Me explico, por supuesto hay que cumplir unas normas básicas a las que no estamos muy acostumbradas, pero realmente esenciales:
El velo
Hay que llevar el pelo cubierto en todo momento desde que salgáis del avión por ley (preparadlo en la bolsa de mano), cosa a lo que te acabarás acostumbrando, sobre todo si viajáis en una época en la que el tiempo sea fresquito.
Nosotras nos hacíamos un moño alto para evitar que se nos escurriera todo el rato y ya está. La próxima vez tendré en cuenta lo que hacen algunas de ellas sustituyéndolo por un gorro y una bufanda, aunque para los espacios interiores, que tienen las calefacciones de gas a tope, no sea un cambio demasiado práctico, ya que no te lo puedes quitar.
En muchas de las casas que visitábamos y en los coches cuando hacíamos trayectos fuera de la ciudad, nos ofrecían quitarnos el pañuelo, aunque en ocasiones ni tan siquiera aceptábamos. Pero nada de chador, hijab o cualquier cosa que podáis leer por ahí. Todos los chador que veréis en las fotos de mi viaje en los sucesivos artículos, nos los regalaron o prestaron en las mezquitas que era necesario llevarlo, es más, en general hasta nos ayudaban a ponérnoslo.
Por lo tanto, sólo llevad unos cuantos pañuelos que tengáis por casa, los más grandes que encontréis, y a disfrutar del país.
Camisetas largas y de manga larga
Tened en cuenta que da igual que sea invierno o verano, que siempre tendréis que llevar camisetas de manga larga, es más, a veces de forma instintiva para comer o porque teníamos calor nos subíamos un poco la camiseta dejando ver las muñecas, y las miradas se clavaban en nosotras. Por otro lado, es prácticamente obligatorio que vuestras camisetas, sudaderas o lo que llevéis, sean largas, os tapen el culete y un poco más.
Por lo demás, no hace falta ropa muy ancha, aunque no ceñida. Las iraníes van muy monas, en general con colores más bien oscuros, las más modernas aportando toques de color con los pañuelos de la cabeza, muy maquilladas, con flequillos fantásticamente peinados, gafas de sol enormes e incluso tacones.
Época recomendada para viajar
Irán es un país precioso en cualquier época del año, con cuatro estaciones claramente diferenciadas, muy parecidas a las que tenemos aquí (ver temperaturas anuales en Irán), pero lo más recomendable es viajar en otoño o primavera, para evitar el frío o calor extremo.
Botiquín y Precauciones
No hay ninguna vacuna obligatoria ni recomendada para viajar a Irán, según el Ministerio de Sanidad, aunque siempre es aconsejable tener el calendario de vacunación actualizado, y ante cualquier duda preguntar en vuestro Centro de Vacunación Internacional más cercano.
Por lo tanto, sólo tenéis que preparad las cosas habituales que podáis necesitar: analgésicos, antihistamínicos, yo suelo llevar sobres para la infección de orina, pero allí hay multitud de farmacias con todo lo que podáis necesitar.
Y de cualquier forma, debéis cuidaros no bebiendo agua que no esté embotellada, por si acaso, aunque al final nosotras acabamos bebiendo agua en casas y mezquitas sin más problema que un sabor un tanto metálico, y con alimentos que no estén cocinados. Las frutas procurad pelarlas, están tan ricas que no podréis parar de comer.
Hospitales
El Ministerio de Asuntos Exteriores califica la sanidad de Irán como buena, en especial en las grandes ciudades como Teherán, Shiraz, Esfahan, Mashhad, etc. donde hay una multitud de hospitales privados de calidad, dotados con todos los medios y personal cualificado, aunque también existen hospitales públicos no totalmente gratuitos, pero sí subvencionados para los iraníes.
Siempre es recomendable contratar un seguro de viaje que os pueda ayudar en caso de tener problemas o necesitar repatriación, pero es importante asegurarse de que la póliza incluye los viajes a Irán, y que tenga una amplia cobertura.
Aparatos eléctricos
La corriente eléctrica en Irán es igual que en España, de 220 voltios a 50 Hz., y los enchufes también, con dos clavijas redondas, por lo que no hace falta llevar ningún tipo de transformador o adaptador para recargar las cámaras de fotos, teléfonos móviles o portátiles.
Internet y teléfono móvil
Desde el año 2.006, las compañías telefónicas españolas tienen acuerdos roaming en Irán, por lo que vuestros móviles funcionarán perfectamente.
En mi caso, opté por la opción mucho más económica de comprar una SIM local de una de las dos compañías que operan en el país, IranCell, que nos facilitaba llamar a hoteles en la siguiente ciudad donde íbamos a ir, taxistas incluso llamar a casa de forma económica.
Además, aunque las conexiones son muy lentas, hemos encontrado WiFi en todos los hoteles, y hasta en algún autobús VIP. Aplicaciones como el Whatsapp, el Twitter, Skype e IMO funcionan sin VPN, el cual si es necesario si queréis abrir Facebook o Instagram.
Forma de conducir
En Irán se conduce por la derecha, y ofrece una red de carreteras y autopistas excelente y bien señalizada. Para conducir allí sólo necesitáis el Carné Internacional de conducir, un seguro de accidentes y mucho valor para esquivar los bailoteos de los conductores iraníes, para los cuales la línea que separa los carriles es algo meramente orientativo.
Si viajáis con vuestro coche, también necesitaréis la Cartilla de Aduanas, para evitar que los coches que entren como turistas al país se queden dentro del mismo eludiendo aranceles, que en España sólo expide el RACE y que debe ser traducido al farsi y legalizado en la Embajada de Irán.
Dinero y tarjetas de crédito
La moneda oficial del país es el rial iraní, pero al ser una moneda tan devaluada (es un gustazo ser millonario por unos días) la gente en la calle en general habla en tomanes. Siendo 500.000 riales, 50.000 tomanes. Al principio esto, supuso un poco de confusión, y nos sorprendía como el primer día en Teherán cuando pagábamos de más, la gente nos lo devolvía y trataba de explicarnos cómo funcionaba, e incluso nos sacaba sus billetes para enseñarnos cuánto teníamos que pagar.
En general, no vais a poder usar tarjetas de débito o crédito internacionales, salvo en contadas excepciones como para comprar alfombras en Esfahan, donde la mayoría de sus establecimientos las aceptan para grandes cantidades. Por ello, es recomendable que lleves suficiente dinero en efectivo contigo.
Si vas a usar las casas de cambio del aeropuerto de Teherán a la llegada, lo mejor es que subas a la planta de arriba que ofrece mejores tarifas. Si no, en el centro de la ciudad, se encuentran las casas de cambio más beneficiosas.
Horario comercial
La primera diferencia que debemos tener en cuenta, es que su día festivo es el viernes, por lo que la gran mayoría de los establecimientos y oficinas se encuentran cerrados, algunos de ellos incluso los jueves por la tarde. Por ello, durante vuestro viaje, la mejor opción para los viernes es ir a los lugares dónde van los iraníes a pasar el día, como por ejemplo Sofeh Mountain en Esfahan.
El resto de los días, la mayoría de las tiendas y casas de cambio abren de 9 de la mañana a 9 de la noche, e incluso en algunas ciudades hasta las 10 h., pero muchas de ellas cierran al medio día. Para ser españolas, incluso el horario de los restaurantes nos ha parecido muy amplio, y aunque fuéramos las únicas clientas siempre nos daban de comer.
Los bancos están abiertos sobre las 8.30 y cierran a las 16 h. Los museos y otros monumentos como Casas Tradicionales, abren entre 9 y 9.30 h. cerrando entre 17 h. y 18 h.
Compras
Los mejores lugares para vuestras compras serían las ciudades de Esfahan y Shiraz sin lugar a dudas. En Esfahan hay productos de calidad como alfombras hechas a mano de seda, lana, algodón, de todos los tamaños, manteles de tela hechos con pigmentos naturales, bolsos y todo tipo de artesanía.
En Shiraz hay multitud de tiendas y centros comerciales, pero me llamó especialmente la atención el Bazar E-Valkil no sólo por su antigüedad, su preciosa arquitectura, con un relajante patio en medio, si no por poder encontrar cosas muy antiguas, como monedas, llaves, cerrojos, espejos y cosas no demasiado caras para hacer regalos, y que luego encontramos más caras en Esfahan, así como artesanía de la cercana Persépolis e incluso ofertas de pendientes, colgantes, cajitas y muchas cosas más.
En nuestro caso también aprovechamos para acercar a nuestras casas algunas de las bondades gastronómicas del país, que podrás encontrar a precios económicos en cualquier rincón, como dátiles, pistachos, pastas de Kashan, dulces de Yazd, tortas dulces de almendras y pistachos, etc. Los amantes del caviar, también podrán encontrarlo más económico que en España.
Propinas
Las propinas no son algo muy habitual en el país, es más, hemos visto como los iraníes tienden a pagar un pellizco menos de lo que pone en la cuenta, por lo que en realidad, la propina más bien se la lleva el cliente.
De cualquier forma, hemos leído que en los hoteles de más categoría y en algunos restaurantes caros, la propina viene incluida en la factura.
Por lo tanto, no es necesario que en general dejéis propina a nadie, pero si lo consideráis oportuno por un buen servicio ofrecido, lo agradecerán con gusto.
Regateo
El regateo en Irán no es cómo en otros sitios del mundo, y aunque es necesario regatear siempre, sobre todo para no pagar la “tasa de turista”, encontraréis que en multitud de bazares de Teherán tienen precios fijos y vendedores con pocas ganas de regatear, pero siempre con grandes sonrisas.
En el caso de los taxistas, por el contrario, si aceptan regateos, y por supuesto podrás obtener grandes diferencias de precio, por lo tanto merece la pena tomar vuestro tiempo, sobre todo para las largas distancias.
Con respecto a los hoteles, tuvimos la mala suerte de ir todavía en temporada alta, y aunque no nos encontrábamos muchos turistas extranjeros, si había muchos iraníes viajando por el país, y nos costaba sudores que nos bajarán el precio, pero en muchas ocasiones, conseguimos descuentos importantes.
Otras recomendaciones
– Fotografía todo cuanto quieras con el respeto que lo harías en cualquier otro país, sólo evitando instalaciones gubernamentales y militares.
– Acuerda siempre el precio antes de subir al taxi, así como pregunta por los precios de la comida con anterioridad en los restaurantes que sólo tengan menú en farsi.
– Recuerda que el consumo de drogas está duramente penado.
– Deja tus prejuicios en casa, y todo lo que te han dicho tu familia y amigos, y piensa sólo en pasártelo bien. ¡Déjate llevar!
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Hola! leí con mucho interés tu blog. Tenfo pensadoir en septiembre, soy una señora mayor que viaja sola. Eso estará mal visto? decís que te alojaste en casas particulares. Como se consigue? Los hoteles son muy caros!
Muchas gracias!