Icono del sitio Está en tu Mundo

Los 5 monumentos subterráneos más increíbles del mundo

El afán de curiosear que tenemos todos los viajeros, nos lleva a buscar lugares diferentes y especiales, que nos llenen de asombro y energía, y lejos de matar al gato, en la mayoría de las ocasiones, la curiosidad nos lleva a sitios fascinantes.

Por este motivo, he decidido hacer un listado de los monumentos subterráneos más increíbles del mundo, que seguro os dejarán con muchas ganas de visitarlos.

1. Cuevas de Ajanta y Ellora, India

Las cuevas de Ajanta, en el estado de Maharastra en India, son impresionantes no sólo por donde están situadas excavadas en la piedra, sino por ofrecer un recorrido, a través de sus frescos, por una gran parte de la historia del arte indio.

Son un total de 30 cuevas esculpidas entre los siglos II a. C. y el siglo VIII, que fueron centros de aprendizaje y retiro de los monjes budistas, y representan con sus esculturas y pinturas la historia de Buda.

Las 34 cuevas de Ellora no resultan para nada menos asombrosas que las anteriores, y son un gran ejemplo de la coexistencia pacífica de las diferentes religiones en India, hasta la llegada del islam, ya que las primeras 12 cuevas que encontramos, construidas entre los años 500 y 650 d.C, están dedicadas a Buda, las siguientes 17, de los siglos VII y VIII, son hinduistas, y las 5 últimas jainistas, que datan de los siglos VIII y XIII.

Ambas cuevas fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1.983.

2. Las minas de sal de Wieliczka, Polonia

Estas minas de sal convertidas en uno de los monumentos más visitados de Polonia, recibiendo más de 800.000 personas cada año, son un espectáculo increíble para todo tipo de públicos, ya que ofrece diversos itinerarios según los intereses de cada visitante.

El primero de ellos es el denominado Itinerario Turístico,en el que se avanza a través de las galerías de sal y se puede visitar entre otras cosas, la Capilla de Santa Klinga, relajarse junto a uno de sus lagos y disfrutar de sus diferentes cámaras en donde hasta los cristales de las lámparas están hechos de sal.

Los otras tres opciones serían el Itinerario Minero, donde realmente tener una experiencia minera con un guía experimentado, el Itinerario Peregrino, si lo que te interesa es visitar todas las iglesias, capillas y detalles hechos por los propios mineros para poder rezar, o si eres muy aventurero, podrás ir en búsqueda de los Secretos de la Mina de Sal.

Las minas de Wieliczka en Cracovia, fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1.978, pero es una de las más antiguas del mundo, ya que llevan siendo explotadas sin interrupción, desde el siglo XII hasta nuestros días. Sus dimensiones sorprenden a cualquiera, con 327 metros de profundidad, y una longitud de más 300 km., se le ha otorgado el sobrenombre de la “Catedral Subterránea de la Sal en Polonia”.

3.  Iglesias subterráneas de Lalibela

En el norte de Etiopía, en medio de la montaña, y a casi 3.000 m. de altura, encontramos el conjunto de las Iglesias subterráneas de Lalibela, contruidas en el siglo II, emulando la ciudad de
Jerusalén de la época de Saladino, y declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1.978.

De las 12 iglesias que se pueden ver, cuatro de ellas están totalmente separadas de la roca, como por ejemplo Bete Giorgis, con base en forma de cruz y casi 15 m. de altura bajo el suelo, mientras que el resto siguen unidas a la montaña ya sea por alguna pared o por el techo.

Además, están separadas en dos grupos diferenciados por el canal de Yordanos, que representa el río Jordán, aunque todas las iglesias están unidas por túneles y pasadizos, el más tenebroso de ellos el de la Boca del Infierno, donde podréis conocer la oscuridad más profunda.

Lo mejor de este monumento es que sigue vivo, es uno de los mayores centros de peregrinaje ortodoxo, y por las mañanas todavía se oyen los mismos rezos que resonaban hace 8 siglos, y los tambores que se usan durante el culto. Además, el hecho de haber estado siempre tan aislado, ha dado lugar a peculiares tradiciones, como la celebración del Mesías el 19 de Enero, cuando los sacerdotes sacan en procesión el Arca de la Alianza.

4. El Metro de Moscú, Rúsia

El metro de Moscú también es conocido con el nombre de Palacio Subterráneo, por
su ostentosa construcción y su rica decoración. Fue inaugurado en 1.935 por Stalin, y su impresionante interior se debe a los principios de la revolución bolchevique, que decidían que los palacios de los zares ya no eran privados, y sacaron sus pinturas y esculturas de reconocidos artistas, las lámparas, y hasta los materiales de construcción, como se puede ver en algunas estaciones completamente terminadas en mármol blanco, a donde los pudiera disfrutar todo
el mundo.

El metro es el primero en el mundo en cuanto a número de pasajeros que lo usan, y el tercero más grande del mundo, después del de Nueva York y Londres, con 327 kilómetros y 192 estaciones, algunas de las cuales no debes perderte.

La estación Komsomólskay, es una de ellas, pensada para asombrar al visitante a su entrada a la ciudad, llena de mosaicos que conmemoran la lucha del pueblo ruso por su libertad, y con un túnel central más grande de lo normal. La estación Kíevskaya también tiene preciosos mosaicos, pero esta vez, con escenas cotidianas de sus vecinos ucranianos, recordando sus tres siglos de unificación. También nos admiraremos con la estación Mayakóvskaya dedicada al poeta Vladímir Mayakovski, y con sus versos adornando los murales de la estación.

La estación de Park Pobedi es la más profunda de todas, a 84 km. de profundidad, y está construida con mármoles de diferentes colores presididos por un mural que representa la victoria en la Segunda Guerra Mundial. Por último, también es interesante visitar la estación Voribiovi Gori, simplemente por el hecho de ser la primera del mundo edificada sobre un río, motivo por el cual se vieron obligados a que fuese la más larga de toda la red de metro.

5. Cuevas de Dambulla, Sri Lanka

El Templo de Oro de Dambulla, en Sri Lanka, está fechado del siglo I a.C, y también se caracteriza por ser un gran centro de peregrinación para budistas e hinduistas desde hace más de 22 siglos, y declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1.991.

A pesar de que hay más de 80 cuevas en los alrededores, las conocidas como el Templo de Oro, son sólo 5 ubicadas en una torre de 160 m., que contienen más de 160 estatuas y 2.100 m. de pinturas representando la vida de Buda, con más de 2.000 años de antigüedad e increíblemente conservadas.

Gracias a los últimos descubrimientos, podemos saber que esta zona estuvo habitada desde hace muchos años, como demuestran varios lugares de enterramiento en los que se han encontrado esqueletos del año 700 a.C. ¿No te parece fascinante?

Cuando escribo artículos de este tipo, siento que no debería parar de escribir, porque siempre faltan miles de lugares increíbles que nombrar. Por ello, y si os interesa el tema tanto como a mí, os animo a descubrir un poco más de una de las 7 Maravilla del Mundo, la ciudad de Petra, las interesantes cuevas de Isla Elefanta en India o las grutas de Yunyang en Datong, China, así como dejarnos vuestros comentarios con las sugerencias de los lugares que creéis que merecen incluirse.

Salir de la versión móvil